Han sido numerosos los acontecimientos que han marcado el devenir humano. En honor a mi gato desaparecido, Amaru (creo que no muerto), voy a dedicar esta entrada a una parte de la historia que me irrita e interesa profundamente.
La colonización de América, en 1492, por parte de un grupo de españoles que no supieron distinguir entre América y Asia - y otros cuantos europeos -, fue una barbarie que hoy en día siguen pagando los países de América latina.
Allá donde hubiese una fuente potecial de riqueza para Europa, han quedado las mayores miserias americanas. De esa época se conservan expresiones a las que, hoy en día, los estudiantes no encuentran sentido. "Vale un Potosí", por ejempo, venía a referirse a algo con mucho valor, comparándolo con la sureña ciudad de Bolivia, actualmente una de las ciudades más pobres de América latina.
Fueron muchos los movimientos de descolonización, o guerras de independencia, que tuvieron lugar por aquel entonces. Una mención especial para Túpac Amaru II, tocayo de mi ex gato y guerrillero torturado y asesinado junto con su familia, por luchar por los derechos de su pueblo.
No es mi interés enumerar la cantidad de atrocidades que se cometieron en aquel entonces, pero sí lo es recordar, a quien pueda llegar este escrito, que la situación que ahora viven es consecuencia, casi en su totalidad, de lo sucedido hace ya más de quinientos años.
Como dijo Galeano: Las venas de América latina siguen abiertas.
¿Nos decidiremos algún día a cerrarlas?
(Para que vean que lo del gato no es mentira, adjunto fotografia)